“Una “picada” musical… y los grandes de la “Guardia Vieja”: Roberto Firpo y Francisco Canaro”.

Nota: Dedico este recuerdo a nuestro querido hermano 
Aldo Pedro Sala, (QEPD), que se encuentra, seguramente, 
compartiendo la mesa del Señor.
Nació en Rosario, Argentina, el 9 de Mayo de 1945.
Se nos anticipó en su viaje a la eternidad, en Rosario, 
4 de Octubre de 1992 (47)

Una noche de verano, en el patio de casa, a principio de los cincuenta. El viejo había traído “jamón crudo” (prosciutto), sopressata, bondiola y varios quesos, gruyere, roquefort y reggianito. Completaban la presentación, aceitunas preparadas por él mismo, con perejil, ajo, y “un poquito” de pimienta, ajíes y “pickles” en aceite de oliva, huevos duros, galletitas y pan, por supuesto.

Esta era una de las cenas de verano preferidas por nosotros, además, los mayores teníamos la oportunidad de beber un poquito de vermouth… con bastante soda.

-La semana que viene vamos a tener un menú preparado para cada día –dijo papá –yo lo voy a escribir y voy a comprar las cosas que hagan falta… -dijo, mientras untaba una galletita con “roquefort”… y mami lo observaba detenidamente.
-Cada día un menú distinto?… –preguntó mami.
-Sí, pero yo te voy a decir el menú y vos me darás la aprobación o no!…

Mi abuela agrandó los ojos y dijo por lo bajo:
-Eso no va a durar mucho!…

Nosotros cubrimos nuestras risas, que pasaron –afortunadamente- inadvertidas.
-Y el domingo?… –preguntó Julio preocupado.
-Los jueves y domingos, son días tradicionales de “pasta” en el almuerzo… ya ustedes saben…jueves “spaghettis con brócoli” o “mostaccioli con arvejas”, “penne con habas” y los domingos…“raviolis”, “gnoquis” o cualquier otra variedad de pasta estofado, albóndigas o niños envueltos…. por supuesto!…
-Menos mal!…. –dijimos casi al unísono los tres (Aldito se sumó al grupo!) –mientras seguíamos disfrutando de la “picada”…

Me olvidé de mencionar los riquísimos salamitos que comprábamos en la esquina de casa, San Lorenzo y Laprida, en el almacén de “Pascual y Mécoli”!… y que yo trataba de servirme, antes de que desaparecieran de la fuente…

-Y qué estabas tocando en el piano? –me preguntó papá, distraídamente, mientras cortaba otras rodajas de pan.
-Ahh!.. un tema que estamos componiendo Julio y yo… un bolero.
-Pero, yo escuché un tango!… –me dijo, poniendo un poco de sal en el plato, ya con el huevo duro listo en la mano…
-Bueno, si… entre una cosa y otra… un tango de la “guardia vieja”… “9 de Julio”, de Padula…. Vos lo tenés en tu repertorio…
-Me parecía… Ustedes saben que ese tango se estrenó en el año 1916… y su autor, José Luis Padula se destacó como gran guitarrista, aunque también tocaba piano y después formó su propia orquesta…
-Sí… yo leí algo, pero me sorprendió, porque los primeros tríos y cuartetos de música típica, se formaban con guitarras, bandoneón, violín y a veces, con flauta o clarinete, y luego entra el piano a formar parte de los conjuntos…
-Bueno, realmente el que introduce al piano formalmente fue Roberto Firpo…. Cuando forma su primera orquesta típica…
-El que te grabó “Amor Imperial”?…
-Sí… yo era jovencito y era admirador de Firpo y Canaro, que por entonces era los que lideraban la música popular….
-Y entonces?… –preguntó Julio, estirándose para alcanzar la fuente…
-Después del fallecimiento del famoso actor Rodolfo Valentino, compuse un tema dedicado a él, “Se fue Valentino”… y “Amor Imperial”, que me sorprendió felizmente cuando en noviembre de 1931, fue grabado por el maestro Firpo y su gran orquesta…
-Apenas tenías veinte y un años!…
-Sí… ustedes conocen la historia… comencé de pibe!… Los de la “guardia vieja” eran de los años 1988, 1890, bueno, hasta antes del 900… y yo… nací en 1909!…
-Y por qué cambiaste el violín por el piano?… –preguntó Julio mientras continuaba atacando la “picada”!…
-Porque cuando el maestro Güenna comenzó a trabajar conmigo, me dí cuenta que era el instrumento que necesitaba, completo, bajos con la izquierda y melodías con la derecha, para incorporarlo a lo que realmente yo quería llegar… una gran orquesta típica…
-Y lo lograste!…
-También era importante, no sólo para componer, sino también para realizar las orquestaciones…

Aldo devoraba las papitas fritas y se preparaba unos mini sandwichitos con pan, queso y los salamitos!…
-Yo quiero tocar el bajo eléctrico!… – decía entre bocado y bocado.
-Vas a estudiar música? – pregunto papá.
-Sí….
-Primero teoría …y solfeo y después el instrumento… no?
-Si… -respondió.
-Y que me decís de Canaro?… –pregunté.
-Te puedo decir que, antes de que yo naciera –dijo papi –Canaro había formado su trío y trataba de hacer dinero para reemplazar el violín casero que había creado con una lata de aceite y un palo para las cuerdas!…
-Un genio!…
-Si señor!… Y eso les demuestra a ustedes, que el que quiere puede!…

Y antes de que comenzara un desvío muy particular en la conversación, a Julio se le ocurrió traer nuevos intérpretes a la mesa, compositores, autores, orquestas y vocalistas… sin pensar –de seguro- que algún día él mismo estaría cantando con la orquesta típica de nuestro padre, José Sala.

Ya de sobremesa, mientras esperábamos que nos regalaran un postre especial,
el “Don Pedro,” que “Lalo Péndola”, un médico cordobés sobrino de la abuela nos había enseñado durante su visita de días atrás, la conversación continuó con temas más actuales, “viejas-nuevas” composiciones, autores e intérpretes, que hacían de aquellos viejos tangos de la “guardia vieja”, nuevas versiones y nuevos éxitos. Pero siempre “tangazos” al fin!…

José O. “Cacho” Sala
Florida, USA – Octubre 04, 2021.